Si estás pensando en cultivar tu propio huerto, pero crees que podría pasar demasiado tiempo hasta conseguirlo, te sorprenderá saber que puedes plantar verduras de crecimiento rápido y conseguir un alimento fresco y sano, antes de lo que pensabas. Una dieta rica en verduras y frutas protege contra enfermedades crónicas comunes, como por ejemplo las enfermedades cardiovasculares o la obesidad. ¿Te atreves a intentarlo?
He aquí las opciones que te proponemos:
Espinacas
La espinaca es una de las verduras que deberías intentar la primera.
Las espinacas crecen realmente rápido y son muy fáciles de cultivar. Solo tienes que poner la semilla en una tierra bien abonada, regarla y esperar. En unas 4-6 semanas, tendrás espinacas frescas. Toda una delicia.
Tienen usos culinarios muy diversos y también se pueden consumir en crudo en ensaladas.
La espinaca es considerada un alimento muy saludable porque contiene vitaminas, minerales, fitoquímicos y bioactivos. Es fuente de nutrientes esenciales como el caroteno, el ácido ascórbico, así como varios tipos de minerales. Contiene actividad antioxidante y aporta seis nutrientes adicionales incluyendo fibra, vitamina B1, proteínas, zinc, fósforo y colina; además de ácidos omega-3, vitamina B3, selenio y ácido pantoténico.
Zanahorias baby (enanas)
Las zanahorias baby, conocidas también como zanahorias enanas, tienen un sabor especial, como concentrado. Y no crecen tanto como las zanahorias comunes.
Si te gusta su sabor y te gustaría disfrutar de una zanahoria pronto, tienes que intentar cultivar las zanahorias baby.
Del mismo modo que con las espinacas, pon las semillas de esta hortaliza directamente en tierra abonada. En unos 30 días, tendrás tu primera cosecha.
Como sucede con su hermana mayor, la zanahoria baby es de color naranja, característico de la presencia de carotenos, entre ellos el beta-caroteno o pro-vitamina A. Además, es fuente de vitamina E y de vitaminas del grupo B como son los folatos y la vitamina B3 o niacina. También contiene minerales, como son el potasio, fósforo, yodo, calcio y magnesio.
Pepinos
Los pepinos tienen muchos usos en recetas variadas. Aunque, por supuesto, también los puedes comer en crudo.
Eso sí, para cultivarlos vas a necesitar un espacio un poco amplio o colocarlos sobre un enrejado.
Los pepinos pequeños se pueden cosechar en unos 50 días tras su siembra.
El pepino destaca por contener vitaminas del grupo B, así como ácido fólico, calcio, fósforo, hierro, magnesio, potasio, zinc y vitamina C. Por si fuera poco, el pepino contiene un flavonol, un antioxidante antiinflamatorio natural. Combate el estrés ya que relaja el sistema nervioso y alivia el impacto de la ansiedad y el estrés. También ayuda a mantener el peso, mejora la salud digestiva y protege al corazón debido a su contenido en potasio.
Rábanos
Probablemente no solo son los que crecen más rápido, sino que también son muy fáciles de cultivar.
Inténtalo. Solo tienes que plantar las semillas en una tierra bien abonada y esperar unos 22-50 días para cosecharlos.
Los rábanos contienen muy pocas calorías y muchos nutrientes. Son ricos en vitamina C, diuréticos y digestivos, pero entre sus numerosas propiedades beneficiosas, también protegen nuestro sistema hepático, gracias a que contienen glucosinolatos.
Lechuga
Existen muchas variedades de lechuga, por lo que puedes elegir la que más te guste, según su textura y sabor. Pero, lo mejor de todo es que crecen fácilmente, incluso en temperaturas más frías y no hay que esperar mucho para cosecharlas.
Según la variedad de lechuga que hayas elegido, lo más probable es que puedas recoger tu cosecha de lechugas en unos 30 a 60 días.
La lechuga, como el pepino, apenas proporciona calorías. Sin embargo, contiene minerales, especialmente potasio, calcio, magnesio, fósforo, así como oligoelementos como el cobre, zinc, níquel, manganeso, etcétera. También es rica en vitaminas A, vitaminas del grupo B, C y E. Contiene una sustancia que actúa como calmante sobre el sistema lechuga, por lo que proporciona propiedades relajantes que favorecen el sueño y tiene poder saciante.
Por si no lo sabías, la lechuga también tiene propiedades analgésicas frente al dolor, ejerce una función depurativa general del organismo y posee propiedades hipoglucemiantes (disminuye el azúcar en sangre). Además, debido a su contenido en betacaroteno, contribuye a prevenir el cáncer, especialmente el cáncer de pulmón y de colon.
Brócoli
El brócoli puede estar disponible para su cosecha en unos 60 días. Es lo que tarda en madurar. Aunque es posible que puedas disfrutar de algunas cabezas de brócoli antes que eso. Lo habitual es esperar unos 58 días para su maduración completa, dependiendo de la variedad.
Si aún no lo has probado o no te gusta el brócoli, puede que después de leer este artículo, cambies de opinión, ya que se puede decir que se trata de una de las verduras que deberías tener en tu huerto. Con solo una ración de 200 gramos de brócoli, se cubre con creces las necesidades diarias de vitamina C de un adulto, ya que aporta casi el cuádruple de lo que se necesita. Además, apenas contiene calorías y es una fuente destacable de potasio, hierro, fósforo, calcio y vitaminas B1, B2, B6 y A, así como ácido fólico. Combate la anemia ferropénica y previene el cáncer porque al contener sulforafano, evita que las células precancerosas se malignicen.
Cebolleta
Las cebolletas o cebollas verdes se plantan como bulbos y tardan unos 6 meses en producir cebollas de tamaño normal, pero en unas 3 a 4 semanas puedes conseguir cebolletas de tallo fino con un sabor deliciosa para hacer revueltas con huevo y ajo.
La cebolleta puede estar lisa para su cosecha en 20 a 30 días desde que se plantan los bulbos.
Se trata de una fuente excelente de nutrientes esenciales como por ejemplo la vitamina K, vitamina C, betacarotenos y folato.
Ayuda a perder peso, a mantener una coagulación correcta de la sangre, estimula el sistema inmunológico, ayuda a prevenir infecciones, promueve una buena salud cardíaca, protege a los huesos, y ayuda a disminuir el crecimiento del cáncer.
Rúcula
La rúcula tiene un sabor muy especial. Si quieres usarla para la ensalada, es una elección muy acertada. Solo tarda aproximadamente un mes en producir hojas maduras que puedes cortar y degustar.
Según estudios recientes, las verduras con ese sabor un poco amargo que la caracteriza combaten el cáncer (tanto de esófago, como de próstata, páncreas y melanoma). Para tu información, esta propiedad también la tiene la coliflor, los nabos o las coles.
Por si no fuera suficiente, la rúcula ayuda a gestionar la diabetes mellitus, previene la osteoporosis y te puede ayudar a perder peso.
Al parecer, si consumes unos 40 gramos de rúcula solo ingieres 10 calorías, pero con la vitamina A, vitamina K, vitamina C, ácido fólico y el calcio que necesitas en un día.
Te hemos presentado 8 variedades distintas de verduras de rápido crecimiento para tu huerto. Puedes cultivarlas en momentos diferentes del año, lo que significa que podrías tener cosecha durante todo el año.
De todos modos, ten presente que para conseguir este huerto, no valen todo tipo de semillas.
No dejes de consultar nuestro artículo en el que te explicamos como conseguir tu propio banco de semillas de supervivencia.
Fotografía de dominio público. Crédito: Imagen de Valeria Cuervo Guerrero en Pixabay