Un estudio nuevo, llevado a cabo por científicos de la universidad de Liverpool, en Inglaterra, ha rastreado el extraño comportamiento del campo magnético en la región del Atlántico Sur y ha descubierto que, en la actualidad, existen anomalías similares a las que había hace 8 a 11 millones de años.
La Anomalía del Atlántico Sur es una zona caracterizada por una disminución masiva en la intensidad del campo magnético de la Tierra, en comparación con áreas de las mismas latitudes geográficas.
En esta zona, existe menos protección de la peligrosa radiación del espacio. Los indicios más importantes de estos fallos técnicos se encuentran a bordo de naves espaciales y satélites.
Los investigadores de Liverpool examinaron los registros del campo magnético de la Tierra, preservados en las rocas ígneas de la isla de Santa Helena, ubicada en el centro de la Anomalía del Atlántico Sur.
Los registros geomagnéticos de las rocas de 34 explosiones volcánicas varias, que tuvieron lugar entre 8 y 11 millones de años atrás mostraron todos estos sucesos, la dirección del campo magnético de Santa Helena por lo general solía apuntar lejos del Polo Norte, tal y como sucede ahora.
La Anomalía del Atlántico Sur es un tema muy debatido entre los científicos. Además del hecho de que daña la tecnología que hay en el espacio, también es objeto de preocupación por dónde se origina y si representa el comienzo de un debilitamiento total del campo, así como un posible reverso de los polos.
Según el autor principal del estudio, Yael Engbers, su estudio proporciona el primer análisis a largo plazo del campo magnético de esa región, desde hace millones de años. Revela que la anomalía en el campo magnético en el Atlántico Sur, no es un hecho solitario y único, sino que existen anomalías similares hace entre 8 y 11 millones de años.
Es la primera vez que se muestra el comportamiento irregular del campo magnético en la región del Atlántico Sur a una escala de tiempo tan amplia. Lo que sugiere que la Anomalía del Atlántico Sur es un evento recurrente.
Fotografía. Crédito: Dr. Yael Engbers. Universidad de Liverpool. Inglaterra.
Fuente: “Elevated paleomagnetic dispersion at Saint Helena suggests long-lived anomalous behavior in the South Atlantic”, Engbers, Y.A. et al. – Proceedings of the National Academy of Sciences of the Unites States of America. – https://doi.org/10.1073/pnas.2001217117