A las 01:23 horas (UTC), el 11 de mayo de 2024, la Región Activa 3664 del Sol registró una erupción solar potente, clasificada como una X5.8. El evento comenzó a las 01:10 horas y terminó a las 01:39 horas (UTC). Sucedió durante la Tormenta Geomagnética Extrema (clasificada como G5) y produjo otra Eyección de Masa Coronal, probablemente dirigida hacia la Tierra.
Esta explosión solar, calificada como X5.8, probablemente sea la segunda más potente del ciclo solar 25, después de la X6.4 que tuvo lugar el 22 de febrero de 2024.
Según el director del Centro de Predicción de Clima Espacial del NOAA, Clinton Wallace: “Este evento es inusual y potencialmente histórico”.
Alerta por Tormenta Geomagnética Severa
Esta actividad solar es tan potente que la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos, que monitorea el clima espacial, activó un inusual aviso por tormenta, por primera vez en 19 años, que más tarde se aumentó a alerta. Temen que las explosiones de plasma y las partículas magnetizadas procedentes del Sol puedan afectar de forma crítica a nuestra infraestructura, y esto incluye la red eléctrica, cableado de internet y satélites.
Con esta erupción, se produjeron emisiones de radio de Tipo IV y II (a una velocidad estimada de 564 kilómetros por segundo), lo que sugiere que tuvo lugar una Eyección de Masa Coronal.
Se calcula que, en el momento de la erupción, las frecuencias de radio más degradadas han sido sobre el este de Asia, Australia, Nueva Zelanda y el Océano Pacífico hasta Alaska, Estados Unidos y Canadá.
Se han observado auroras en lugares inesperados, desde tan lejos como el sur de Florida, Estados Unidos y el mar Mediterráneo. De hecho, numerosos países de Europa han visto auroras: en Madrid y el País Vasco (España), Irlanda, Inglaterra… Y también en Tasmania y Nueva Zelanda.
Durante la última tormenta geomagnética, G5, que se produjo en la Tierra, en octubre de 2023, se produjeron apagones eléctricos en Suecia, de hasta una hora de duración, daños en 12 transformadores en Sudáfrica que tuvieron que ser reemplazados, daños en los sistemas de base satelital y comunicaciones, y se instruyó a los aviones para que evitaran volar a latitudes elevadas cerca de las regiones polares. En aquella ocasión, también se vieron auroras desde lugares inusuales, como, por ejemplo, en los países europeos situados en el Mediterráneo o tan al sur como en Texas, Estados Unidos.
Además, esta actividad solar generó un fallo temporal en el satélite SOHO y dañó el Advanced Composition Explorer (ACE). Otras aeronaves también tuvieron problemas. Los astronautas a bordo de la Estación Espacial Internacional tuvieron que refugiarse en una zona mejor habilitada de la nave para evitar los altos niveles de radiación.
Con respecto al pronóstico actual, en el día de hoy, se prevé que se registren períodos de tormenta moderada (G1 a G2) debido a la llegada de dos halos de Eyecciones de Masa Coronal.
¿Qué podría suceder como consecuencia de las Tormentas Geomagnéticas G4 Severa y Extrema G5?
Debido a que la Región Activa 3664 se acerca al limbo oeste del Sol, aumenta el riesgo de que puedan producirse tormentas geomagnéticas y de radiación solar durante los próximos días.
Muchas personas podrán ver auroras en lugares donde no suele ser habitual, pero las autoridades y empresas también estarán muy pendientes a los efectos en la infraestructura, como, por ejemplo, en los sistemas de posicionamiento global (GPS), en las comunicaciones de radio, e incluso en las redes eléctricas.
¿Cómo nos afectará la tormenta a las personas en la Tierra?
La activación de un aviso o alerta por tormenta geomagnética significa que el clima espacial podría afectar a infraestructuras que son críticas en nuestro planeta o que están orbitando cerca de la Tierra. Además, este aumento en la corriente, podría causar daños en tuberías (también en gaseoductos), líneas eléctricas y vías ferroviarias.
Según ha explicado un astrónomo en el Observatorio Lowell, Joe Llama, los sistemas de comunicaciones que podrían sufrir más los efectos, son las ondas de radio de alta frecuencia, por lo que no deberían verse afectadas los móviles o la radio del vehículo que funciona con ondas de frecuencia de radio mucho más altas. Sin embargo, no se descarta que puedan producirse apagones eléctricos.
De forma preventiva, se recomienda mantener los aparatos bien cargados y disponer de baterías de emergencia, generadores y radio.
La alerta en realidad está dirigida mayormente a las empresas y autoridades, para que tomen medidas para proteger las infraestructuras que son vitales y estén atentos a cualquier posible efecto.
El evento Carrington
La última vez que tuvo lugar una tormenta geomagnética severa en la Tierra, calificada como G5, fue en el año 1859. Aquel evento se conoce como el Evento Carrington y arrasó los telégrafos que había en el mundo. Obviamente, hoy en día no disponemos de telégrafos, pero el efecto podría ser devastador. Los apagones eléctricos no solo afectarían a las casas, sino también a los negocios, a los bancos, al cableado de fibra óptico submarino de Internet, etc. Ya en el espacio, algunos satélites podrían perder altitud y verse alterados los sistemas de posicionamiento (GPS).
Probablemente, lo menos peligroso es que podrían verse auroras en diversas partes del mundo donde no es habitual.
Imagen. Erupción solar del 11 de mayo de 2024 X5.8 Crédito: NASA SDO/AIA 304, Helioviewer
Enlace a vídeo (fuente externa a AlertaTierra.com): https://www.youtube.com/watch?v=-dr2BIlDGDk Crédito: Servicio Nacional de Meteorología de Estados Unidos
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