El 15 de abril de 2019, tras ser remolcada de una playa remota donde se encontró flotando, cerca de Seattle, los científicos examinaron el cuerpo de la ballena gris adulta que parecía desnutrida.
La preocupación se centra ahora en el excepcional alto número de
ballenas grises que están apareciendo muertas en las costas de Oregón y
Washington este año.
Según explican, los meses de abril, mayo y
junio, suelen ser los picos de varamiento de ballenas grises. Pero, la
Federal agency NOAA Fisheries ya ha contabilizado hasta nueve ballenas
muertas en las playas de Washington y una en la de Oregón. Esto aumenta
el número total en 21 varamientos desde que comenzó el año 2019.
La semana pasada, justo frente a Seattle, se encontró una ballena adulta flotando muerta en la bahía Elliott.
Para
el Cascadia Research Collective, todo apunta a que este año vamos a
tener numerosos varamientos de ballenas grises. Desde el mes de febrero,
han participado en las necropsias realizadas a las ballenas que
aparecieron muertas. La mayoría, malnutridas.
Según parece,
estaban muy delgadas y apenas tenían o no tenían comida en sus
estómagos. Lo que indica que el estrés y la falta de alimentos haber
terminado con sus vidas.
A pesar del inusual número de ballenas
muertas, NOAA Fisheries afirma que la población de ballenas grises está
bien y que esto no ha afectado a su número.
Fotografía. Crédito: Cascadia Research Collective