Apoyados por aviones militares, las tropas brasileñas desplegadas finalmente en el Amazonas, combaten los incendios forestales que están arrasando la región, en un intento para controlar el fuego que ha puesto de acuerdo a miles de ciudadanos del mundo que exigen a las autoridades de todos los países que hagan algo para impedir que los incendios sigan avanzando.
Seis estados brasileños han solicitado ayuda militar, por lo que unas 44.000 tropas han acudido en respuesta a su solicitud, según ha confirmado el Ministro de Defensa de Brasil. Los estados son Tocantins, Para, Acre, Rondonia, Roraima y Mato Grosso.
Los militares están siendo apoyados por dos aviones C-130 Hércules, capaces de descargar hasta 12.000 litros sobre los incendios.
La municipalidad de Nova Santa Helena, en el estado de Mato-Grosso, es una de las más castigadas por los incendios.
Los incendios en el Amazonas se han convertido en un problema a escala mundial y ha aumentado las tensiones entre Brasil y los países europeos que piensan que el Gobierno de Brasil ha sido negligente en cuanto a la protección del medio ambiente.
“Los pulmones de nuestro planeta se están quemando. ¡Hay que salvarlos!” Es un grito unánime de la población que protesta frente a la Embajada de Brasil en la Ciudad de México. Los líderes de los países europeos consideran prioritario ayudar a Brasil y a otros países a apagar estos incendios y preservar la selva, tesoro de biodiversidad y vital para el clima del mundo, por el oxígeno que emite y el carbono que absorbe, además de por la lluvia que genera para la agricultura en Sudamérica, siendo el hogar de millones de plantas, animales y personas.
Bolivia también está sufriendo para apagar los incendios en sus bosques y campos. Un avión B747-400, sobrevuela las zonas devastadas para ayudar en la extinción y proteger los bosques.
El sábado, varios helicópteros, junto con tropas militares, bomberos y voluntarios en tierra, trabajaron conjuntamente para extinguir los incendios en la región de Chiquitania, en Bolivia, donde los bosques están muy secos en esta época del año.
Imagen que muestra el área afectada por la concentración de partículas que emiten los focos de incendio. 20 de agosto de 2019. Crédito: Agencia Espacial Europea