Día tras día, nos arriesgamos a sufrir un amplio número de fenómenos naturales posibles como incendios, inundaciones, tormentas extremas, huracanes, tornados, incluso ataques terroristas. Mientras que todos esperamos que nunca se produzca una situación de emergencia de este tipo, lo cierto es que es importante estar preparados de antemano para una emergencia. Incluso esperando que después de una emergencia acudan los servicios de emergencias a la zona, lo cierto es que tenemos que pensar que quizás esta ayuda no se pueda recibir de forma inmediata. Por ello, estar preparados para ser autosuficientes durante un cierto tiempo después de una catástrofe, puede ser crucial para nuestra supervivencia.
Esta guía te ayudará a hablar con tu familia sobre lo que podéis necesitar y te aconsejará sobre cómo prepararte para una emergencia. Cuando lleves a cabo esta planificación, asegúrate de que toda la familia participa. Esta planificación sólo será efectiva si todos saben lo que tienen que hacer en este caso y si están dispuestos a hacerlo.
Averigua cosas sobre la zona en la que vives.
Tómate tu tiempo para aprender sobre la ciudad en la que vives. Identifica los riesgos que existen en tu zona, y averigua cuáles deberías añadir en tu planificación de emergencia. Aprende a utilizar las herramientas y recursos de tu comunidad. Disponer de la información correcta, te puede ayudar a trazar un buen plan para prepararte ante una emergencia.
¿Qué peligros hay en tu zona de residencia?
Tanto si es un incendio, inundación, huracán, terremoto, tornado, tormenta de invierno, ola de calor… Es importante que comprendas el impacto que puede causar y las señales que avisan de que se va a producir.
Comprueba qué tipo de fenómenos naturales son más probables en tu zona de residencia. Si fuera necesario, contacta con las autoridades o servicios de emergencia para averiguarlo y consigue más información al respecto.
Ante una emergencia, ¿qué señales de advertencia se utilizan donde vives?
¿Existe algún tipo de sirena, emisora de radio local que pueda emitir un aviso o comunicado de emergencia?
Si fuera preciso, contacta con las autoridades locales para consultar qué métodos utilizan para avisar a la población ante las distintas situaciones de emergencia que se pueden producir en la zona donde vives.
¿Qué hacer con tus mascotas?
Si tienes que abandonar tu casa, no dejes a tus mascotas solas. No sabes cuánto tiempo tardarás en volver. ¿Podrán cuidarse solas?
Si vas a un centro habilitado para refugiarte, acuérdate de llevarte lo necesario para cuidar de tus mascotas (comida, agua, medicamentos, etc.). Consulta si está permitido que te lleves tus mascotas.
¿Qué deberías hacer si algún miembro de tu familia o vecino tiene necesidades especiales?
El término “necesidades especiales” se refiere a muchas cosas cuando hablamos de preparación ante una emergencia. Como ejemplo de una persona con necesidades especiales se encuentra alguien que sea discapacitado, un anciano, alguien que no hable nuestro idioma, una persona que tenga la pierna rota, etc.
Identifica las personas que tengan necesidades especiales. Asegúrate de incluirlas en tu planificación. Comprueba sus necesidades y recuerda que tienes que incluirlas en tu preparación ante una emergencia.
¿Qué otra información puede ser de utilidad en mi planificación para una emergencia?
Comprueba los planes de emergencia de cada sitio en el que pases cierto tiempo, por ejemplo, el trabajo, colegio, etc.
Averigua cosas sobre la zona en la que vives.
Con la información que has recopilado sobre lo que puede suceder en la zona en la que vives, ahora tienes que prepararte para responder de la forma adecuada ante una emergencia. Es el momento de comenzar el proceso revisando la información que has recogido, hablando sobre los riesgos que existen y las diferentes clases de emergencias que pueden producirse, e identificando cada uno de ellas.
Una emergencia puede ser de cualquier tipo y de distinta gravedad. Afrontar cada una de ellas, y la evacuación en cada caso, difiere si se trata de un terremoto, incendio, tornado, inundación, etc. Si sabes qué tipo de emergencias pueden darse en la zona donde vives, podrás establecer cómo reaccionar ante cada una de ellas.
Hablar sobre lo que hacer durante una evacuación. Tener en cuenta las mascotas.
Una evacuación puede ser una situación muy rápida, caótica y nerviosa. Saber de antemano lo que se hará, asegurándote que cada miembro de la familia sepa lo que tiene que hacer, hará que comprendan sus responsabilidades y que afronten la situación con más calma y seguridad.
Contacto fuera de tu zona de residencia.
Tener un amigo o familiar en una zona alejada de tu residencia puede ayudar a mantener la comunicación. En una emergencia, es probable que se vean interrumpidos los servicios de comunicaciones a nivel local. Sin embargo, podría ser posible contactar con personas que residan en zonas más alejadas. De esta forma puedes confirmar qué miembros de la familia se encuentran bien, si todos contactan con la misma persona para informarle.
Por lo tanto, todos los miembros de la familia deben contar con los números y dirección de contacto de esta persona.
Así mismo, es preciso establecer un lugar de encuentro tras una emergencia. Es importante programar dos sitios, por si uno falla o no es alcanzable.
Prepárate.
Preparar un plan de emergencias para la familia es un gran primer paso. Protege tu familia y a ti mismo siguiendo algunos de los pasos mencionados a continuación. Estas medidas podrían salvarte durante el momento crítico de una emergencia.
Toma nota de los números de teléfono de los servicios de emergencias. Enseña a tus hijos cómo y cuándo llamar al servicio de emergencias. Enseña a tu familia cómo deben apagar el gas, el suministro eléctrico, y el agua. Compra un extintor de incendios y enseña a tu familia a utilizarlo. Instala detectores de humo, especialmente cerca de los dormitorios.
Inspecciona tu casa para comprobar qué elementos pueden caerse, romperse, o provocar un incendio.
Almacena suministros de emergencias y un kit de emergencias. Apúntate a una clase de primeros auxilios. Comprueba cuáles son las salidas de emergencia de tu casa. Si es posible, intenta localizar dos salidas de emergencia por cada habitación.
Practica tu Plan de Emergencias.
Nunca se puede estar totalmente preparado para una emergencia. Sin embargo, cuando pienses que has terminado tu planificación, es hora de que la pongas en práctica. Revisa el plan con tus amigos y familiares. Asegúrate de que esté actualizado y que cada uno sabe lo que tiene que hacer en caso de una emergencia.
Lo idóneo sería que revises el plan de emergencia cada 6 meses. Haz comprobaciones de seguridad, por ejemplo, revisa que los detectores de humo funcionan, que el extintor está en condiciones, que las rutas de evacuación están libres, que las pilas están operativas… Reemplaza los alimentos, medicamentos y bebidas que tengas en el kit de suministro de emergencias, etc.
Un buen momento para recordar llevar a cabo estas comprobaciones es hacerlo cada vez que cambiamos de estación, por ejemplo, con la llegada del otoño y de la primavera.
Importante sobre las evacuaciones
En ocasiones, es posible que la situación de emergencia sea tan grave que sea inseguro permanecer en el interior de la vivienda. En el caso de que las autoridades ordenen la evacuación de la vivienda, recibirás información sobre cómo debes proceder. En estos casos, suelen solicitar la evacuación mediante el uso de sirenas, llamadas de teléfono, o notificando calle por calle.
Para saber qué métodos utilizan las autoridades para informar sobre una evacuación, contacta con la agencia que coordina las emergencias.
Guía sobre Evacuación
Siempre…
- Si crees que podría producirse una emergencia o una evacuación, mantén el tanque del combustible del vehículo lleno. Es posible que las estaciones de servicio cierren durante la emergencia o que no dispongan de suministro eléctrico para estar operativas. Planifica transportar a tu familia en un solo coche para evitar gastos innecesarios. Si no tienes vehículo propio, acuerda de antemano quién os llevará, familiares, amigos o vecinos.
- Compra una radio que funcione con pilas, con objeto de estar informado sobre los acontecimientos si no hay electricidad y sigue las instrucciones facilitadas por las autoridades.
- En caso de evacuación forzosa, abandona la casa lo antes posible para evitar cualquier empeoramiento de la situación.
- Sigue las rutas de evacuación recomendadas.
- No intentes acortar camino. Estas rutas podrían estar bloqueadas.
- Cuidado con puentes y carreteras que hayan podido quedar dañados. No circules por zonas inundadas.
- Aléjate de líneas de electricidad que hayan caído sobre la vía.
Si tienes tiempo…
- Recoge tu mochila/kit de emergencia.
- Ponte botas o calzado resistente, así como ropa que pueda protegerte del clima.
- Asegura tu casa. Cierra todas las ventanas y puertas.
- Apaga el sistema eléctrico y desenchufa todos los pequeños electrodomésticos.
- Informa a los demás de lo que vas a hacer. Contacta con la persona que tienes fuera de la ciudad para informar que estás bien y que ponéis en práctica el plan de emergencias.
Te animamos a descargarte esta información en formato pdf, e imprimirla para poder seguir los pasos indicados.