
La implantación de microchip en humanos ya es el presente.
La implantación de un microchip en una persona no es nada nuevo. Hace unos años, se hizo como experimento, pero hoy en día hay empresas, en distintas partes del mundo, que invitan a hacerlo de forma voluntaria… Personas de distintas partes del mundo, tienen un microchip en su cuerpo. ¿No te lo crees? Haz una búsqueda en internet sobre este tema y te sorprenderás. Porque, aunque te parezca mentira, ya hay muchas personas que se lo han implantado. ¿Te preguntarás por qué y dónde?
Por una parte, muchas personas siguen las tendencias, la moda… Se trata de estar al día con las nuevas tecnologías y sus usos. Pero, si tienes dudas, es posible que pronto sea necesario, por ejemplo, para pagar tus compras, fichar en el trabajo, acceder a una discoteca, asistir a una consulta médica, identificarte… Y si todavía hay alguien que se muestre contrario a introducirse ese cuerpo extraño en su cuerpo, finalmente puede que, algún día, no muy lejano, se convierta en obligatorio, por ley.
Personas que se han implantado un microchip de forma voluntaria…
La implantación de microchip en humanos ya es el presente. El ingeniero británico de software, Dave Williams, empleado de Mozilla, se implantó un microchip en su mano. Concretamente entre su dedo pulgar e índice. Del tamaño de un grano de arroz, apenas perceptible. Al parecer, le permite abrir la puerta de su casa con solo mover la mano. Según admite, su mala memoria hace que pierda las llaves con frecuencia. Ahora ya no tiene ese problema y, además, puede presumir ante sus vecinos.
Pero, la moda del microchip ha viajado también por otros países: Suecia, Alemania, Australia, Nueva Zelanda, España, han llevado a cabo iniciativas para promover esta tecnología.
Según un informe de mayo de 2018 emitido por AFP, unas 3.000 personas se habían implantado un microchip en Noruega.
En Wisconsin (EEUU), una empresa decidió que quería ponerles un microchip a sus trabajadores
No hace mucho, en Wisconsin (Estados Unidos), una empresa decidió que quería ponerles un microchip a sus trabajadores. Los empleados de la empresa, Three Market Square, tuvieron la opción de implantarse un chip en su mano para poder fichar y acceder a su puesto de trabajo de forma sencilla, con solo pasar la mano por el lector de microchip. ¿Qué crees que sucedió? Pues que 50 de 80 trabajadores se apuntaron.
No solo eso, también hicieron una especie de fiesta de implantación de microchip y algunos se lo pusieron en vivo y en directo para que los que todavía no lo tenían claro, pudieran ver lo indoloro y sencillo que era ponérselo.
Pero, si piensas que solo en Estados Unidos se les podría ocurrir hacer algo así, te equivocas. También ha pasado en Europa. Por ejemplo, una empresa en Suecia, invitó a sus empleados a implantarse un microchip del tamaño de un grano de arroz en su muñeca. El microchip les permite abrir puertas, poner en marcha impresoras o comprar, con solo mover la mano.
La implantación de microchip en humanos ya es el presente. Según explicaba el cofundador y Jefe ejecutivo de Epicenter, reemplaza muchas de las cosas que se tiene, como por ejemplo, otros dispositivos de comunicación, tarjetas de crédito, llaves… Por lo que es muy cómodo.
Cada vez hay más personas en Suecia que se implantan chips RFID en su mano para desbloquear puertas, llevar tiques de tren o incluso para hacer pagos. El sistema RFID, contrariamente al código de barras, permite acceder de manera remota a la información que contiene, por lo que se utiliza en etiquetas antirrobo, en estaciones de esquí e incluso en los chips de identificación de mascotas. También se encuentran presentes en la mayoría de los teléfonos inteligentes, en tarjetas de contacto y en pasaportes electrónicos.
En Ibiza, España, se puso en marcha un sistema de identificación implantado bajo la piel
En Ibiza, España, la discoteca Baja Beach puso en marcha un sistema de identificación implantado bajo la piel. Un chip digital que permitía a su portador acceder al local sin tener que presentar documentación alguna e incluso pagar las consumiciones. Este dispositivo, conocido como VeriChip, se aplica en el brazo, está sellado herméticamente y tiene una duración de más de 75 años. Funciona como un dispositivo de radiofrecuencia implantable de unos 12 milímetros por 2,1 milímetros, y que contiene un número de identificación único. Permanece en estado de letargo hasta que la energía de radiofrecuencia del escáner le llega y lo activa. Al activarse, emite el número de verificación.
La intervención quirúrgica para implantarse este dispositivo tan solo requiere anestesia local y se puede hacer de forma ambulatoria. La operación deja una pequeña cicatriz que podría requerir una tirita durante un breve espacio de tiempo, pero, según el Director de la discoteca, no presenta efectos secundarios. Sus usuarios están encantados por lo cómodo que resulta.
Sí, cada vez hay más empresas que apuestan por la implantación de microchips. Por si no lo crees, Tech start-up Dangerous Things ya ha vendido miles de kits de implantación de microchips para humanos y algunos para empresas tecnológicas en Europa.
Pero, los microchips en humanos van mucho más allá del uso de hoy en día, como abrir puertas, pagar o poner en marcha aparatos. Según el periódico “The Sun”, en un futuro, podría, por ejemplo, liberar hormonas para impedir un embarazo, mejorar las condiciones físicas de una persona (su audición y visión), conectarnos a ordenadores…
Cadenas de noticias apoyan la implantación de un microchip a personas
Algunas cadenas de noticias han hecho público su apoyo a la implantación de un microchip en las personas. Por ejemplo, la NBC ya ha publicado un vídeo en el que habla maravillas sobre las ventajas que tiene ponerse un microchip como sustituto de nuestras llaves, dinero, y como identificación.
Los que se están implantando en la actualidad en una persona, dicen que no tienen función de GPS. Pero, si es cierto que no es así, ¿cuánto tiempo crees que pasará hasta que lo incluyan? Y, ¿crees que informarían una vez esté esta opción operativa? ¿Informarían de otras posibles funciones que pueda tener?
Para el Profesor Alessandro Acquisti, del Carnagie Mellon University, en Heinz College, las empresas suelen afirmar que estos microchips son seguros y encriptados pero, la palabra “encriptado” no tiene por qué ser imposible de hackear.
Además, la tecnología prevista para un uso determinado, también se puede usar para otra cosa. Es decir, si un microchip implantado hoy en día sirve para facilitarte el acceso o para pagar, en un futuro (si no lo están haciendo ya), podría servir también para vigilar el tiempo que los empleados pasan en el aseo, en su descanso para comer, si llegan tarde… Y todo ello, sin el consentimiento y conocimiento del empleado. De hecho, una vez que lo tienes implantado, ¿quién te garantiza que no se utilizará con otros propósitos? Y seguro que puedes pensar en algunos más…
Posibilidad de hackeo a un microchip implantado
Para colmo, existe el problema de que puedan hackearlo. Un microchip no se puede apagar o desconectar. Puede estar emitiendo y online, todo el tiempo. Permite conectarse a ti en cualquier momento. Por lo tanto, habría que tener mucho cuidado con los datos personales que se introducen en él o las facilidades que se permite hacer con él.
Si avanzamos más en el futuro, el propósito es el de implantar un microchip en el cerebro humano. Los científicos afirman que podría mejorar la inteligencia humana.
La implantación de microchip en humanos ya es el presente.
Pero, ¿y si implantarse un microchip se convierte en algo obligatorio, por ley? ¿Y si no pudieras acceder al dinero de tu cuenta sin identificarte con tu microchip o acudir al médico?
Todos sabemos que nuestra sociedad avanza cada vez más hacia no llevar dinero en efectivo encima. Primero usamos tarjetas de crédito, después pulseras, y el móvil para pagar… ¿Será el microchip el siguiente paso?
Por supuesto, si todos tenemos microchip, sería más fácil saber qué compramos, qué películas vemos, leer nuestro historial médico, saber si estamos trabajando y dónde, por dónde nos desplazamos… El control será cada vez mayor, aunque parecerá que somos más libres.
¿Y tú? ¿Qué piensas sobre la idea de implantarte un microchip? ¿Lo harías? ¿Cuánto tiempo crees que pasará para que sea obligatorio su implantación para, por ejemplo, acceder al médico? Nos gustaría conocer tu opinión.
Crédito imagen: Gerd Altmann en Pixabay