A estas alturas, suponemos que todos sabemos las normas básicas de seguridad frente al coronavirus, es decir, mantener la distancia de seguridad, lavarnos las manos con frecuencia y no tocarnos la cara, boca, nariz y ojos, al mismo tiempo que hay que permanecer confinados en nuestras casas (los que no trabajen, claro está). Pero, mientras cumplimos con estas directrices, tenemos que seguir alimentándonos y, para eso, es necesario comprar.
Teniendo en cuenta que no siempre es posible pedir la compra a domicilio. ¿Cómo deberías comportarte en el supermercado? ¿Qué hacer cuando llegas a casa con tu compra? ¿Sabes lo que tienes que hacer para desinfectarla?
Seguramente antes de salir al supermercado, te habrás lavado las manos, te habrás puesto los guantes y, posiblemente, también una mascarilla. Son las medidas recomendadas para salir a la calle. Pero, ¿qué sucede con los productos que has comprado?
Es conocido que el coronavirus, en principio, se transmite por las gotas que se esparcen en el aire al estornudar, toser o hablar, que luego son inhaladas por alguien o por contacto con una membrana mucosa como los ojos, los labios, la garganta y la nariz.
Otra forma de transmisión es la transmisión vectorial donde las gotas caen sobre una superficie. Cuando alguien toca la superficie, tiene el potencial de contraer la enfermedad al tocarse los labios, los ojos o la nariz.
Sabemos también que, al tratarse de un coronavirus nuevo, y poco conocido, todavía se están llevando a cabo estudios para conocerlo e identificar todos los factores que están relacionados con él. Sin embargo, por el momento, gracias a la interpretación de algunos expertos, contamos con algunos datos básicos.
Según el ex Comisionado de la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos, el coronavirus podría transmitirse potencialmente por medio de objetos contaminados. Según explica, se trata de un virus pegajoso. Es decir, que la estructura de la envoltura protectora del coronavirus lo ayuda a adherirse firmemente a ciertas superficies como son la piel, especialmente, así como la tela, madera, el plástico y el acero.
Sin embargo, la Organización Mundial de la Salud mantiene que las posibilidades de que una persona infectada pueda contaminar objetos comerciales son bajas y el riesgo de contraer el COVID-19 por un paquete que ha sido trasladado, ha viajado y se ha visto expuesto a diferentes condiciones medio ambientales y temperaturas, también es bajo.
Por otro lado, según un experto en enfermedades infecciosas y profesor asistente en la Escuela de Medicina de Rutgers New Jersey Medical School, existe un riesgo teórico de transmisión en superficies, y eso incluye el embalaje.
Al mismo tiempo, investigadores de la universidad de Hong Kong pusieron gotas contaminadas con coronavirus en diversas superficies y sus resultados no hallaron ningún tipo de virus infeccioso en el papel después de tres horas. Sin embargo, de forma alarmante, pudieron detectar un nivel importante en la capa exterior de una mascarilla quirúrgica después de 7 días.
En una investigación reciente, publicada por The New England Journal of Medicine, se ha informado que se ha descubierto que el coronavirus puede vivir en las superficies durante días. En base a su estudio, puede permanecer vivo en el plástico hasta un total de 72 horas y en el cartón durante 24 horas.
Ante las distintas informaciones y opiniones que existen con respecto al embalaje en general, es lógico que pensemos que lo más conveniente sería tomar las precauciones necesarias para evitar cualquier riesgo, especialmente cuando te traes paquetes, embalajes o la compra a tu casa.
Lo que puedes hacer cuando estás comprando
Sal a la calle con guantes y, a ser posible, también con mascarilla. Mantén la distancia de seguridad establecida por las autoridades sanitarias de tu país de residencia (aconsejamos un mínimo de 2 metros).
En el supermercado, ponte los guantes que te ofrezcan sobre los que traes puestos de la calle.
Si te dan a elegir entre papel o plástico, pide siempre papel. El coronavirus puede permanecer vivo en el plástico hasta 3 días y en el papel solo dura 3 horas.
Cuando vayas a escoger fruta o verdura, ponte guantes. Sí, ya sabemos que llevas puestos guantes (al menos, deberías). Pero, para seleccionar ahora la fruta y verdura que quieras comprar, lo aconsejable es que te pongas otros guantes nuevos sobre los primeros. Los que has traído puestos desde la calle (o te pusiste al entrar al supermercado) ya podrían estar contaminados.
Cuantas menos personas toquen los paquetes y embalajes de tu compra, mejor. Selecciona lo que quieres comprar e introdúcelo en tu carro o cesta de la compra. A la hora de pagar, maneja tú los paquetes.
No pagues en efectivo. El dinero físico es otra superficie en la que puede permanecer el virus. Si lo puedes evitar, mejor.
Para pagar, utiliza tu tarjeta de crédito o débito. Si puedes evitar que la otra persona toque tu tarjeta, todavía mejor. No obstante, ten presente que se trata de un material de plástico y que el aparato para pagar con tu tarjeta es un vector de transmisión. Una vez la hayas utilizado, guárdala aparte y recuerda desinfectarla bien cuando salgas del supermercado o al llegar a tu casa.
¿Cómo desinfectar tu compra?
Mete toda tu compra en casa y ponla sobre una superficie de fácil limpieza (por ejemplo, la encimera de la cocina).
Se habla que es conveniente dejar la compra en “cuarentena” hasta el día siguiente, pero esto es difícil de cumplir si tienes congelados o productos que requieran estar refrigerados. Para al resto, podrías intentar dejarlos ahí hasta el día siguiente. La carga viral podría ser menor para entonces.
Vuelve por donde has venido y desinfecta todo lo que hayas tocado (por ejemplo, pomos de puertas, llaves de la luz, etc.).
Desinfecta cualquier otro elemento que hayas tocado cuando estabas fuera de casa (por ejemplo, gafas, teléfono, llaves, etc.)
Descálzate y ponte calzado de estar en casa. Deja el calzado que has utilizado en un lugar que pueda ventilarse.
Cámbiate de ropa. Ponte ropa limpia y lávate las manos de forma escrupulosa.
Saca todos los artículos que has comprado de las bolsas y sitúalos sobre una superficie que esté desinfectada.
Conforme los vas sacando, ve desinfectándolos con toallitas desinfectantes o pulverízalos con un espray desinfectante.
No guardes las bolsas de papel o de plástico, ni tampoco los envoltorios. Tíralo todo directamente a tu contenedor cerrado de basura.
Lávate las manos y desinféctalas.
Mientras haces todo esto, ten mucho cuidado de no tocarte la cara, ni ninguna otra parte del cuerpo, bajo ningún concepto.
Posiblemente, lo más recomendable sea que lleves la mascarilla puesta cuando estés fuera de casa y también cuando estés descargando tu compra. No es un consejo de las autoridades sanitarias, pero podría ayudarte a no poderte tocar la cara en este proceso.
¿Cómo desinfectar la fruta y la verdura?
El Departamento de Agricultura de los Estados Unidos afirma que no se tiene conocimiento de que el Covid-19 pueda transmitirse a través de los alimentos o de sus envases. Sin embargo, aunque no exista razón para pensar que los alimentos puedan estar infectados por el coronavirus, lo cierto es que es mejor prevenir que curar. ¿Acaso no es cierto que podemos enfermar por ingerir alimentos contaminados?
La recomendación del Ministerio de Sanidad de España para lavar y desinfectar la fruta y la verdura es lavarlas bajo el chorro del agua del grifo, cepillarlas de forma exhaustiva (las que puedan ser cepilladas), y utilizar lejía (apta para uso alimentario). Ten presente que, lavarlas con agua abundante solo retirará el polvo y los residuos visibles, pero no es suficiente para eliminar pesticidas, restos de fertilizantes y microorganismos dañinos.
No existe evidencia científica que demuestre que usar los productos siguientes para desinfectar la fruta y la verdura sean eficaces, pero se ha venido haciendo desde hace muchos años…
Cloro. Se trata de uno de los sistemas de desinfección más utilizados en los alimentos. Para ello, mezcla una cucharada de cloro por cada litro de agua. Es conocido también como lejía alimentaria. Pero, mucha precaución. No te pases en las cantidades o podrías sufrir una intoxicación.
Lejía. Sumerge la fruta y verdura en agua potable con 1 cucharadita de postre de lejía (4,5 ml) por cada 3 litros de agua. Después, aclara con abundante agua. Mucho cuidado con el tipo de lejía que uses. Ten presente que debe estar identificada como apta para desinfectar agua de bebida o alimentos.
Bicarbonato y vinagre. Mezcla una cucharada de bicarbonato y otra de vinagre en el recipiente en el que vayas a lavar la fruta o la verdura. Introduce los alimentos en él durante una hora. Después, retíralos y enjuágalos.
Sal y limón. Para eliminar bacterias de frutas y verduras, mezcla una cucharada de sal y el zumo de medio limón en medio litro de agua. Lava los alimentos con esta mezcla.
Agua oxigenada. Añade una parte de este producto por cada tres de agua y sumerge los alimentos durante 5 minutos.
Vinagre. Echa un vaso de vinagre en medio litro de agua y remoja las frutas o verduras durante 10 minutos.
De todos modos, recuerda cumplir algunos consejos más de prevención:
Lávate las manos con agua tibia y jabón antes y después de manejar alimentos frescos.
Mantén separadas las frutas y verduras de alimentos cárnicos crudos.
Lava los utensilios de cocinar (como por ejemplo las tablas de cortar, los cuchillos, la encimera, etc.) con agua caliente. Para algunos elementos, es mejor lavarlos en el lavavajillas.
Utiliza tablas de cortar distintas para carne y para otros productos. Especialmente para la manipulación de alimentos crudos y cocidos o asegúrate de lavarlas muy bien.
Lava los productos frescos antes de pelarlos. De esta manera evitarás que las bacterias pasen al cuchillo, al interior de la fruta o vegetal, o que queden en tus manos.
Seca las frutas y verduras después de lavarlas. Lo más recomendable es secarlas con papel de cocina.
Desecha las hojas externas en alimentos como la lechuga o el repollo.
¿Cómo desinfectar botellas, tarros y paquetes o embalajes?
Limpia los paquetes y envoltorios con una toallita desinfectante o un paño humedecido con un producto desinfectante. Y recuerda lavarte después bien las manos.
Por desgracia, hasta la fecha, no se han llevado a cabo pruebas especificas de productos de desinfección sobre el virus COVID-19 con objeto de determinar qué tipo de desinfectantes son más eficaces.
Algunas personas creen que desinfectar cada envoltorio y paquete que traen a casa es una sobre-reacción ridícula. Para otras, es otra medida más para protegerse.
Fotografía de dominio público. Crédito Imagen de Alexas_Fotos en Pixabay