¿Cómo calificar algo que va más allá de la catástrofe? Las plagas de langostas que se están observando desde China hasta la India, pasando por Pakistán, Afganistán, el centro de Asia, Oriente Medio y el oeste de África, no solo impresionan por las cantidades enormes de langostas y por la gran cantidad de países que están afectando, sino también por las terribles consecuencias.
Un solo enjambre de langostas puede contener hasta 80 millones de ejemplares adultos. La plaga podría provocar que cerca de 5 millones de personas tengan que sufrir inanición. Y es que, todo apunta a que se está preparando un desastre de proporciones imposibles de imaginar. Aunque no atacan a las personas, esta situación es extremadamente grave. Estas langostas no solo están destruyendo los cultivos arables, sino que están comiendo todos los arbustos y hierbas que sirven de pasto para los animales. Sin animales, no hay leche, no hay carne, no hay cultivos, no hay cosecha… No hay nada, salvo hambre y muerte.
Lo que se avecina parece algo realmente devastador, casi apocalíptico para los millones de personas que viven en los países afectados y que tienen la sensación de que se avecina un desastre.
Por desgracia, a las millones de langostas que avanzan sin control, hay que añadir que están procreando. En Pakistán y la India, la estación del monzón comienza en el mes de julio, y con las lluvias, las langostas también ponen huevos. Una vez entran en una fase gregaria, una generación de langostas se puede multiplicar por veinte cada tres meses. Así que, cuando nacen, lo hacen de forma exponencial, y todo se escapa de las manos. Al menos veinticinco países penden de un hilo, a punto de sufrir una devastación histórica.
Frente a lo que les depara el futuro con estas plagas de langostas, el riesgo del coronavirus apenas les preocupa. No disponer de medios para subsistir, sin lugar a dudas es mucho peor.
Se trata de la plaga de langostas más grave que tiene lugar en 70 años. El Comité Internacional de Rescate (IRC) afirma que podría dejar a cerca de 5 millones de personas en el Este de África afrontando una inanición.
Un enjambre de un kilómetro cuadrado de langostas puede consumir la misma cantidad de comida en un día que 35.000 personas.
Kenia, Sudán, Etiopía, Uganda, el sur de Sudán, Eritrea, Somalia y Djibouti, son algunos de los países más castigados por esta plaga que amenaza con hacerse cada vez mayor.
Descontroladas, las plagas de langostas se hacen más fuertes y podría tardarse años y necesitar miles de millones de dólares para poderlas controlar, según advierte la FAO.
Las langostas están invadiendo estos países sin miramientos, de una forma nunca vista anteriormente en una generación. Numerosas hectáreas de pasto han quedado completamente destruidas. ¿Qué van a comer los animales, las reses…? ¿De qué van a sobrevivir todas estas personas?
Pero, si crees que este problema no te atañe porque estás lejos. No subestimes a las langostas. Son animales gregarios que pueden volar largas distancias sin problema. Pueden desplazarse kilómetros y kilómetros durante 24 horas, sin detenerse. Por lo que pueden cambiar de un país a otro, en cuestión de días.
En 1988, un enjambre que se encontraba en el norte de África, cruzó el Océano Atlántico y llegó al Caribe y a Sudamérica. Incluso hoy en día, atraviesan perfectamente el Mar Rojo. Por lo tanto, sí, podrían llegar hasta donde vives, o al menos bastante cerca.
En la actualidad, la forma más efectiva que existe para combatir los enjambres de langostas son esparcir pesticidas desde el aire para matarlas. Aunque se puede decir que no es la manera ideal para hacerlo, debido a los efectos adversos de estos químicos en la biodiversidad y en la salud. Para el futuro, parece que se estudia poder usar el humo para ahuyentarlas, así como los biopesticidas, aunque todavía hay que avanzar al respecto.
Hasta el 27 de junio de 2020, según ha informado la FAO, se han visto formarse más enjambres en Etiopía, y también se han visto grandes cantidades de langostas en: Somalia, Kenia, Yemen, Arabia Saudita, Pakistán, India e Irán. Al mismo tiempo, Sudán, Etiopía, el sur de Sudán, Pakistán, Somalia y la India deberían permanecer en alerta máxima durante las próximas cuatro semanas.
Fotografía del pronóstico de la plaga de langostas. Crédito: FAO