
Más de 1 millón de residentes han tenido que huir de sus hogares tras la segunda ola de inundaciones extremas que azota amplias zonas de Bangladesh. Por el momento, ya son 7 millones las personas que se han visto afectadas por las inundaciones, mientras que el nivel del agua aumenta y también el caudal de la mayoría de los ríos más importantes, en una veintena de puntos en 20 distritos.
Según el Ingeniero Ejecutivo de la Dirección de Desarrollo de Agua de Bangladesh, la situación está empeorando y, además, las inundaciones se prolongarán este año.
Durante las últimas horas, regiones del norte, noreste y centro del país, se han visto afectadas por las persistentes inundaciones.
Como consecuencia de esta situación catastrófica, más de 1 millón de personas han tenido que abandonar sus hogares, quedándose por lo tanto sin un techo sobre sus cabezas y un medio para subsistir.
En el distrito de Kurigram, una de las zonas más castigadas, desde el fin de semana, miles de residentes han tenido que buscar un lugar seguro en un terreno elevado.
Unos 135.000 residentes han recibido alimentos durante las pasadas semanas, así como ayuda gubernamental.
Además, por el momento también han tenido que abandonar sus hogares unos 50.000 residentes a lo largo del rio Teesta.
La zona se encuentra en alerta roja desde el lunes, 13 de julio de 2020, cuando el río ya se encontraba más de 0,5 metros (1,7 pies) por encima de su nivel de peligro.
La última víctima ha sido un bebé de tan solo ocho meses que se ha ahogado. Su madre encontró a su bebé flotando en las aguas que habían anegado su casa cerca de Teesta.
Según el Servicio de Noticias Indo-Asiática IANS, siete millones de personas se han visto afectadas hasta ahora por las inundaciones.
Las fuertes lluvias y las aguas que descienden desde la India, son las razones principales que han aportado las autoridades para justificar esta insólita y catastrófica situación en Bangladesh. Además, de que la segunda ola de inundaciones tiene lugar cuando todavía no han retrocedido las aguas de la primera inundación.
Empezó a llover a finales del mes de junio y, desde entonces, no solo no ha cesado de llover, sino que la situación ha empeorado con creces, afectando a muchas más zonas, destruyendo cultivos y afectando a millones de personas, especialmente en las zonas más pobres.
Las aguas proceden de la India, donde las lluvias torrenciales también están causando estragos.
Por desgracia, las previsiones meteorológicas indican que seguirá lloviendo de forma intensa en el país durante los próximos días, lo que todavía podría empeorar aún más este diluvio.
Fotografía. Residentes intentan llegar a una zona segura tras la inundación provocada por el desbordamiento del río Kamla. Unas 100 casas se han visto arrastradas por las aguas, según los residentes. Crédito: ANI