El huracán Delta ha tocado tierra entre Cancún y Playa del Carmen, en la ciudad de Puerto Morelos, según han confirmado desde el Centro Nacional de Huracanes de los Estados Unidos, con vientos máximos sostenidos de 165 kilómetros por hora, lo que lo convierte en un huracán de categoría 2. Se esperan lluvias torrenciales en varios municipios de Yucatán y Quintana Roo.
En un informe emitido por el Centro Nacional de Huracanes de los Estados Unidos, se informa que Delta avanza sobre la costa este de México y se advierte que las condiciones climáticas se deterioran rápidamente sobre la costa noreste de la península de Yucatán con una marejada ciclónica potencialmente mortal.
Ante la llegada del huracán, las autoridades de Quintana Roo habían procedido al traslado de turistas por el impacto del huracán, siendo el 85% mexicanos y el resto extranjeros.
Las autoridades mexicanas esperaban que su paso por la península de Yucatán terminara sobre el mediodía del miércoles, descargando a su paso lluvias de intensas a torrenciales, con vientos fuertes de 150 a 240 kilómetros por hora y olas de cinco a nueve metros de altura. Así lo han confirmado desde el Servicio Meteorológico Nacional de México.
Delta ha sido uno de los ciclones más potentes en llegar a la costa este mexicana en 15 años, por lo que ha tenido en vilo a las autoridades. Esta misma mañana, durante la conferencia presidencial matutina, un portavoz de la Secretaría de Marina anunciaba un operativo de resguardo de 10.600 efectivos para realizar labores de apoyo frente al ciclón.
Por su parte, el gobernador del estado de Quintana Roo, emitió una alerta roja en la zona norte del territorio y anunció la evacuación de las zonas hoteleras de Cancún, Puerto Morelos y la isla de Holbox.
Quintana Roo está sufriendo el impacto de Delta poco después de afrontar el azote de otra tormenta potente, Gamma, que dejó un saldo de al menos seis víctimas mortales y unas 600.000 personas afectadas por las inundaciones en el sur de México.
El huracán Delta triplicó su potencia en menos de dos días, creciendo de una depresión tropical a todo un huracán de categoría 4 el lunes por la mañana. Afortunadamente, perdió fuerza cuando tocó tierra.
Según el monitoreo del Centro Nacional de Huracanes de los Estados Unidos, se prevé que el huracán llegue al país entre el jueves por la noche y el viernes por la mañana, en un punto todavía sin determinar de los estados de Texas, Luisiana, Alabama o Mississippi. En cuanto a su potencia, al avanzar por aguas cálidas, es muy probable que llegue a la categoría 3 en su aproximación a la Costa del Golfo.
En Luisiana, donde todavía hay damnificados del huracán Laura viviendo en refugios, ya han iniciado las evacuaciones voluntarias en varias zonas bajas.
La entidad suministradora de energía eléctrica de Luisiana está monitoreando la tormenta muy de cerca y se está preparando para responder ante la situación que se va a producir. En principio, afirma que ya ha restablecido el servicio la semana pasada a todos los que se habían quedado sin electricidad en el sudoeste de Luisiana.
El gobernador declaró el estado de emergencias el martes, ante la llegada de Delta, animando a los residentes a prepararse para un huracán extremadamente peligroso, independientemente de su categoría.
Delta descargará mucha lluvia, acompañada por fuertes vientos y hará subir la marea considerablemente. Se esperan inundaciones en la zona costera de Luisiana.
Los primeros azotes de la tormenta llegarán el viernes por la mañana, pero si la tormenta se ralentiza, podría llegar el sábado por la mañana.
La gobernadora de Alabama también ha declarado el estado de emergencia el martes ante la llegada del huracán, de manera que exista tiempo suficiente para prepararse debidamente y para poder solicitar ayuda de FEMA.
Se ha activado una orden de evacuación para los turistas de la costa del golfo de Alabama, incluyendo Orange Beach, Gulf Shores, Dauphin Island y las zonas de Ono Island y Fort Morgan.
Mississippi ha puesto más de 160.000 sacos de arena en los condados situados en zonas bajas y mantiene abiertos nueve refugios.
En Texas, el gobernador también ha puesto los recursos en alerta, ante el presagio de que el huracán pueda causar daños importantes. Se pide a los texanos que tomen medidas inmediatas para protegerse del impacto de esta fuerte tormenta.
Imagen del huracán Delta, intensificándose antes de tocar tierra en la península del Yucatán, en México. 6 de octubre de 2020. Crédito: NOAA/GOES-East