La Oficina de Meteorología de Islandia (IMO) ha informado que se ha producido una importante deformación del suelo, relacionada con una serie de terremotos que se han registrado en la península de Reykjanes, entre Fagradalsfjall y Kleifarvatn, desde el 16 al 22 de octubre de 2020.
El terremoto más intenso de esta serie ha sido de 5,6 grados, el 20 de octubre de 2020, ampliamente sentido en el país, especialmente en el sur de la península y en la capital: Reikiavik, a unos 25 kilómetros (15 millas) del epicentro.
La IMO ha registrado un total de 983 terremotos en la península desde las 13:43 horas (UTC) del 20 de octubre hasta las 08:08 horas (UTC) del 21 de octubre de 2020. La mayoría de ellos registraron una magnitud por debajo de 1,0 grados, 529.356 fueron de 1,0 a 2,0 grados; 110 de 2,0 a 3,0 grados y 28 superiores a 3,0 grados.
Según ha explicado el coordinador de IMO, se está desarrollando un proceso activo, a largo plazo, en la zona, por lo que prevén que seguirán registrándose terremotos en las próximas horas y que probablemente también sean sentidos en la zona de la capital.
La amplia señal detectada cerca de Sholahraun representa un movimiento de hasta 5 centímetros (1,9 pulgadas), asociadas con el terremoto de 5,6 grados.
Al mismo tiempo, según se ha confirmado, se ha observado una deformación cerca de Driffell y al este de Keilir, que han relacionado al movimiento de las fallas en la región. También se han detectado múltiples fracturas, relacionadas con estos terremotos, en el terreno de la zona.
Según ha explicado IMO, estos terremotos están relacionados con la reactivación vulcano-tectónica de la península de Reykjanes, que comenzó en diciembre de 2019. La inestabilidad continúa, por lo que se prevén más terremotos.
El código de alerta para la aviación en Reykjanes se ha aumentado al amarillo en enero de 2020.
Imagen. Crédito: IMO