Está previsto que Moscú registre la mayor tormenta invernal de su historia, entre el 11 y el 14 de febrero de 2021, convirtiéndose así en la nevada más duradera que cae en la ciudad desde 2018. Entre el viernes y el domingo se prevé que se acumulen hasta 40 centímetros (16 pulgadas) de nieve, pero teniendo en cuenta que ya hay 35 centímetros (13,8 pulgadas) de nieve en la ciudad, la profundidad total de la nieve podría sobrepasar perfectamente los 77 centímetros (30 pulgadas) de 2013.
Todo ello es consecuencia de la intensa tormenta invernal que está azotando Moscú desde esta tarde, y la cantidad de nieve que se prevé caiga en la capital de Rusia, será para recordar.
Según explica el director del Servicio Estatal de Meteorología de Rusia, nevará y nevará sin cesar, pronosticando que podrían acumularse entre 50 y 55 centímetros más (de 19,7 a 21,6 pulgadas) de nieve.
Para este meteorólogo, será una tormenta de nieve apocalíptica, nada que ver con un simulacro, sino real. Muy real.
Además, se advierte que el viento podría alcanzar los 54 – 72 kilómetros por hora (33,5 a 44,7 millas por hora), mientras que las temperaturas bajarán a los -20ºC.
La portavoz del Servicio de Meteorología de Rusia ha explicado que la tormenta es una continuación de la “Bestia del Este”, la tormenta que se desplazó por gran parte de Europa la semana pasada.
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