Alrededor de las 23:50 horas, el lunes, se desplazó un tornado por el condado de Brunswick, en el sudeste de Carolina del Norte, provocando al menos 3 muertos y 10 heridos, así como daños en algunas casas, según han explicado fuentes oficiales. El mayor daño se concentra en el condado de Brunswick.
Según el Servicio Nacional de Meteorología de los Estados Unidos, se ha informado acerca de daños en la zona de Grissettown, a lo largo de la N.C.17.
El tornado ha provocado daños en casas, y arrancado algunas de sus cimientos. También ha partido árboles por la mitad y derribado algunas líneas eléctricas a lo largo de la carretera.
En un principio, según informaron desde la Administración de Emergencias del condado de Brunswick, algunas personas habían quedado atrapadas en sus casas, mientras que el Departamento de Bomberos de Wilmington informaba que enviarían equipos para ayudar a encontrar a las personas desaparecidas tras el paso del tornado.
Fuentes oficiales del condado de Brunswick han confirmado que el tornado ha causado daños importantes en la zona, ya que algunas casas han quedado completamente destruidas, lo que ha forzado la evacuación de algunas personas de sus casas.
Desde los Servicios de Emergencias del condado de Brunswick han confirmado que al menos 50 casas se han visto dañadas en la zona de Ocean Ridge Plantation, cerca de Ocean Isle Beach, por lo que se ha habilitado un albergue temporal para los evacuados por la tormenta.
La empresa suministradora de energía eléctrica, Brunswick Electric Membership Corporation ha explicado que a primera hora del martes un apagón ha dejado a más de 3.000 personas sin luz.
Brunswick County Schools informó que no habría colegio el martes, ni para el alumnado ni para el personal.
Se activó una alerta por tornado a las 23:44 horas (hora local) el lunes en la región, con la advertencia de clima extremo para última hora del lunes que podría incluir tornados, así como inundaciones y granizo.
A primera hora del martes, todavía buscaban a posibles personas atrapadas bajo los escombros de las casas derrumbadas.
Fotografía. Crédito: Sheriff del condado de Brunswick