
Prepararte para una emergencia no consiste solamente en almacenar todo tipo de productos. Además de contar con un almacén en el que guardes todo tipo de productos esenciales, tienes que ser muy consciente de que, por mucho que inviertas en ello, llegará un momento en el que estos recursos se agoten. Y entonces, ¿de qué piensas sobrevivir?
Las gallinas son consideradas un recurso fundamental para cualquier persona que se prepare para una emergencia. Son animales muy útiles que pueden proporcionar un amplio abanico de recursos.
Tener gallinas no supone una gran inversión y, por el contrario, aporta muchas ventajas. Es el mejor animal de granja por el que empezar. No solo por su carne y huevos. También porque pueden acabar con ciertos insectos y animales y porque sus heces son un compost excelente para cualquier huerto.
Si te has decidido por un pequeño número de gallinas como parte de tu estrategia de supervivencia, te vamos a explicar algunas cosas básicas, pero importantes que deberías tener en cuenta.
Existen numerosas razas de gallinas, pero, vamos a centrarnos en tres que consideramos muy adecuadas para tu propósito.
La gallina Brahma es una raza tranquila y familiar. De gran tamaño, también lo son los huevos que pone. Además, es buena ponedora e incubadora y es una buena madre.
El gallo puede llegar a pesar 5 kilos y la gallina 4,5 kilos.
Los huevos que ponen esta raza de gallinas suelen pesar unos 55 gramos con cáscara de color amarillo a marrón rojizo.
La gallina Australorp también es muy dócil y de gran tamaño. Se trata de una gallina vigorosa y muy precoz. Sus pollitos empluman rápidamente, lo que interesa bastante a la hora de aumentar tu “gallinero”. Los huevos que ponen son grandes y abundantes.
El gallo puede llegar a pesar entre 3,1 y 3,5 kilos y la gallina entre 2 y 2,5 kilos.
Los huevos que ponen suelen ser de 55 a 60 gramos mínimo, de color marrón claro.
La gallina araucana, conocida también como Mapuche, destaca porque carece de cola. Pero, esta característica para nada le impide ser una gallina tan ponedora como las demás. De raza grande, es conocida porque pone huevos de color azul turquesa, tanto por fuera, como por dentro del cascarón.
Esta gallina empieza a poner huevos a partir de las 16 semanas de vida. Los huevos que pone suelen ser de unos 50 gramos.
El gallo puede llegar a pesar entre 2,1 y 2,6 kilos y la gallina entre 1,7 y 2,1 kilos.
Curiosamente, las gallinas Orpington tienen las mismas medidas en cuanto a altura, anchura y longitud, lo que les proporciona un aspecto redondo, aunque también son de gran tamaño.
El gallo puede pesar entre 3,5 a 4 kilos, mientras que la gallina puede pesar de 3 a 3,5 kilos.
Los huevos que ponen suelen pesar entre 55 y 60 gramos, con la cáscara de color amarillento.
La gallina Ancona es una gallina rústica, muy fuerte y vivaz. Tiene tarsos amarillos con manchas negras que la caracterizan. Esta raza es apta para una cría extensiva y es muy buena ponedora. ¿El problema? Que raramente incuba, por lo que, si usas esta raza para tener pollos, probablemente tengas que usar incubadora.
El gallo suele pesar entre 2 y 2,5 kilos y la gallina entre 1,8 y 2,2 kilos.
Ponen huevos de unos 50 gramos con cáscara de color blanco.
La Orpington posiblemente es la mejor raza para un gallinero de “supervivencia” porque es muy constante en sacar su producción adelante y porque se puede adaptar fácilmente a todos los tipos de climas. Además, es la más forrajera y bastante autosuficiente cuando vive en semi-libertad. Es decir, que sabe cuidar de sí misma.
Las gallinas no piden demasiado y tampoco tendrás que gastar mucho dinero para mantenerlas. Una vez que dispongas de un lugar seguro (su gallinero), comida y agua, ya no necesitarán mucho más.
Si dejas que una de ellas incube huevos, ya no tendrás que invertir en la compra de más gallinas y podrás ir ampliando el número de gallinas ponedoras o sustituir a las que ya hayan alcanzado la edad en la que ya no ponen más huevos.
El cuidado de las gallinas no tiene gran complicación. Tendrás que suministrarles agua fresca y agua, de forma diaria, a menos que las tengas en semilibertad, donde puedan alimentarse por ellas mismas. Entonces, solo tendrás que preocuparte de proporcionarles agua fresca diaria. En este caso, es aconsejable suplementar su comida para que puedan contar con todos los nutrientes que necesitan. De todos modos, siempre puedes usar bebederos automáticos e incluso comederos automáticos.
Las gallinas son animales omnívoros, por lo que pueden comer cualquier cosa: carne, pescado, verduras, frutas. Estarán encantadas si les das los restos de pelar fruta, verdura, o los restos de la comida cocinada que no se haya consumido en el día.
Una gallina, de media, puede poner un huevo al día. Si tienes unas cuantas, pues ya puedes ir haciendo la cuenta. Son un aporte de proteínas excelente. Eso sí, si hace mucho frío, puede que no pongan todos los días, pero en los días más cálidos, seguro que no falta en su puesta.
Las gallinas se reproducen rápidamente. Es suficiente con que tengas un gallo en el gallinero y, si tienes la raza Orpington, tendrás más posibilidades de conseguir pollitos. Las gallinas de esta raza suelen incubar sus propios huevos, lo que te evita tener que usar incubadoras, electricidad, y tenerte que preocupar por si nacerán o no… Sus madres se encargarán de todo.
Las heces de las gallinas son el mejor fertilizante natural que puedas conseguir. Y, si lo que pretendes es prepararte para sobrevivir a una gran catástrofe, sin lugar a dudas tendrás previsto (si no has empezado ya), a tener tu propio huerto.
Las gallinas no necesitan mucho espacio y, aunque algunas razas posiblemente lleven peor permanecer en espacios confinados, hay otras que lo soportan mejor. Pero, por lo general, todas se adaptan bastante bien.
Tener gallinas puede ayudarte a mantener controlada la población de insectos, a que se coman las hierbas que no quieres de tu huerto o jardín, e incluso a perseguir los ratones que pueda haber.
Son muy fieles a quienes les proporcionan comida y agua, así que no te preocupes si algún día se escapan. Volverán cuando tengan hambre.
Las gallinas pueden dar mucha compañía y servir como entretenimiento si quieres pasar un rato observándolas. Estarán más saludables si están al aire libre y tienen una zona por la que moverse libremente.
Imagen de Xuân Tuấn Anh Đặng en Pixabay