
El enjambre sísmico que está aconteciendo en la península de Reykjanes supera todas las expectativas. Ya son más de 35.000 los seísmos que han tenido lugar en dos semanas. Cada vez son más las probabilidades de que se registre una erupción, y la zona más probable para ello podría ser desde Keilir hasta Fagradalsfjall.
El 10 de marzo de 2021, el Consejo Científico de Protección Civil se reunió por teleconferencia, concluyendo que – si la situación actual continúa durante más tiempo – la probabilidad de que se produzca una erupción aumenta.
El procesamiento de las imágenes del satélite, recibidas en la mañana del 10 de marzo y los últimos datos del GPS, confirman que el magma continúa restringido en el extremo sur del canal de magma que abarca desde Keilir hasta Fagradalsfjall. Por lo que esta zona todavía se considera la más probable para un evento eruptivo.
Se prevé que sigan registrándose más terremotos si el flujo de magma sigue expandiéndose y provoca tensión en la zona.
Los científicos admiten que es importante monitorear muy de cerca la actividad que tiene lugar en las laderas sur del Fagradalsfjall, por si pudiera indicar que el canal de magma se extiende hacia el sur.
Es importante comprender que ese magma podría abrirse camino hacia la superficie sin gran actividad sísmica, como sucedió en el año 2010 en el Fimmvörðuháls. En aquella ocasión, no había signos claros de una erupción inminente por parte de los datos recoplados por la Oficina de Meteorología de Islandia.
Por este motivo, IMO ha instalado cámaras web con el fin de vigilar cualquier cambio en el movimiento del magma.
Fotografía. Crédito: IMO