En el transcurso de unas horas, se contabilizaron hasta 1.600 rayos en el Ártico. Un evento que, según el Servicio Nacional de Meteorología de los Estados Unidos, solo sucede una vez o dos cada diez años.
Lo confirmaron desde el Servicio Nacional de Meteorología en Fairbanks, Alaska, este pasado martes. Una tormenta eléctrica que se registró el lunes por la noche, descargó entre 100 y 200 rayos, durante un pulso excepcional de calor.
Lo inusual de estas tormentas es lo extremadamente al norte que se registraron, bastante al norte de Prudhoe Bay, directamente sobre el hielo oceánico. Un evento que, según el Servicio de Meteorología, solo sucede una vez o dos cada diez años.
Pero, no fueron las únicas. Una serie de tormentas en mar de Chukchi y en Siberia, el martes por la noche, llegaron al norte de Alaska y hasta Point Barrow.
Según Vaisala, la Red de Detección Global de Rayos, se registraron 1.613 rayos en el norte de Alaska y en el noroeste de Canadá, desde las 05:00 horas, el lunes.
Los rayos en latitudes elevadas son un fenómeno bastante raro, y el hecho de que las tormentas eléctricas se desplacen desde Alaska sobre el Océano del Ártico es todavía más excepcional. Es inusual que una masa de aire inestable sobre el Océano Ártico genere sus propios rayos.
Fotografía de archivo.