Todo parece apuntar a que la erupción del volcán de Cumbre Vieja en la isla de La Palma, será la más longeva de su historia. Por el momento, el volcán permanece tranquilo, mientras la lava sigue discurriendo hacia el mar a través de los tubos lávicos, sin afectar a nuevas zonas. No obstante, según explican los expertos, aunque los parámetros hayan bajado, esto no significa que la erupción vaya a terminar en un corto plazo de tiempo.
Anoche tuvieron lugar solamente 5 terremotos y el cono principal emite mayormente cenizas volcánicas y vapor de agua. La sismicidad continúa a la baja en profundidades intermedias durante las últimas 24 horas, localizada en las mismas zonas.
El nivel del tremor se mantiene en valores bajos con poca variabilidad, mientras que la deformación del terreno no tiene tendencia en las estaciones cercanas al centro eruptivo y se encuentra estable en el resto de las estaciones de medición.
Con respecto a la nube de cenizas volcánicas ha llegado a los 1.200 metros, viéndose desplazada en dirección sudoeste, por lo que este escenario favorece la operatividad aeronáutica.
Esta tarde, según informaba el vulcanólogo del Instituto Geográfico Nacional, Rubén López, se podía observar cómo el volcán había vuelto a expulsar ceniza volcánica.
Fotografía realizada por la Guardia Civil y compartida por Involcán, en la que se puede apreciar cómo la actividad del volcán de Cumbre Vieja, en La Palma, se ha centrado este viernes en expulsar vapor de agua, con emanación intermitente de gases y cenizas. Crédito: Involcán
