Contrariamente a lo que sería lo más normal, la viruela del mono está apareciendo y extendiéndose en el planeta. Pero, ¿será cierto y estaremos ante una nueva pandemia a nivel mundial?
Según han explicado algunos médicos, un sistema inmunológico comprometido podría facilitar que se extienda este virus. Y, teniendo en cuenta que, para muchos, la vacuna contra el COVID agota el sistema inmunológico, ¿las personas que se han administrado la vacuna del COVID-19 son una presa fácil para este virus de la viruela del mono?
El Dr. Paul Alexander, quien se identifica a sí mismo como un epidemiólogo especializado en enfermedades infecciosas, experto en COVID, y con formación en bioterrorismo y bioguerra. Exempleado en la Organización Mundial de la Salud, la OPS, el gobierno canadiense, IDSA y el gobierno de los Estados Unidos en varios roles de epidemiología y EBM… Y que trabajó y estudió con el Dr. Donald Henderson, en la escuela de bioterrorismo Johns Hopkins, quien erradicó la viruela… Asegura que:
“La vacuna contra la viruela para prevenir la viruela del mono podría causar epidemias mundiales de viruela. Advierto, no seas tan estúpido, que has dañado el sistema inmunológico de millones (billones) de personas con las vacunas contra el COVID. Los expertos dicen que la vacuna contra la viruela tiene una efectividad del 85% en la viruela del mondo. No son buenas noticias, ya que millones/billones de personas ahora están inmunocomprometidas por la vacuna del COVID, y podría reintroducirse la viruela”.
Muchas vacunas se han creado a partir de virus vivos, dando por sentado que nuestro sistema inmunológico mantendrá a raya a los intrusos. Pero, algunos aseguran que la vacuna contra el COVID ha debilitado los sistemas inmunológicos. Y ya hay médicos que están advirtiendo que, vacunar contra la viruela podría provocar la aparición de la viruela. ¿Será cierto? ¿Esta vacuna podría provocar lo contrario a lo que se pretende debido a que las personas ya tienen su sistema inmunológico afectado por los efectos de la vacuna contra el COVID?
Para el Dr. Alexander, es posible que la viruela se extiende en la población, aunque – de momento – según los datos que se barajan, considera que no lo suficiente como para convertirse en una pandemia a nivel mundial, dado que tampoco se han registrado víctimas mortales (por el momento).
Lo cierto es que no hay nada oficial al respecto y no parece que se vaya a confirmar en ningún momento nada semejante. Para las autoridades sanitarias del mundo, la vacuna contra el COVID no ha provocado ningún efecto negativo en el sistema inmunológico.
Con respecto a los casos de la viruela del mono. De momento, ya hay más de 12 países que han confirmado casos de la viruela del mono. Prácticamente en todos los continentes. En muchos lugares se asegura que se ha importado, al regresar la persona de un país tras permanecer en contacto directo con un infectado. Sin embargo, ya se han dado casos en los que la persona con la viruela del mono no se ha visto infectada tras regresar de un viaje, sino que lo ha contraído en su ciudad de residencia. Entonces, ¿cómo se ha contagiado?
Se está hablando que los contagios parecen enfocarse en un colectivo determinado de la población. Sin embargo, todo parece indicar que hay personas de todo tipo contagiadas, por lo tanto, el virus no se enfoca en un sector determinado de la población.
Lo cierto es que la viruela del mono es una enfermedad inusual. Aparece en seres humanos de África de forma esporádica y, en ocasiones, provoca brotes epidémicos. Pero, la mayoría de los casos han sido siempre en la República Democrática del Congo (y desde 2016, también en Sierra Leona, Liberia, Nigeria y República Centroafricana).
En el año 2003, se produjo un brote en Estados Unidos, pero fue como consecuencia de roedores importados de África como mascotas que diseminaron el virus a perros en las praderas y, luego, a personas en las zonas occidentales y centrales del país.
Se conoce como vía probable de contagio la transmisión de los animales a través de líquidos corporales, incluidas las gotas salivales o respiratorias o el contacto con el exudado de la herida. Entre personas, la transmisión ocurre de manera ineficaz y se cree que sucede principalmente por gotas respiratorias durante el contacto cara a cara prolongado (las relaciones sexuales, obviamente son el mayor riesgo). La tasa de letalidad oscila entre un 4 y un 22%.
Síntomas de la viruela del mono
En principio, se siente cansancio, fiebre, dolor muscular y de las articulaciones. Días más tarde, se desarrollan lesiones en la piel (bolsitas con pus que se rompen). Si estas lesiones siguen evolucionando, se produce un agrandamiento de los ganglios.
La enfermedad puede tardar entre dos y cuatro semanas en desaparecer (desde que empezaron los primeros síntomas).
Recomendaciones frente a la viruela del mono
Según un experto del Departamento de Medicina Preventiva y Control Pública de la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia, Francisco Monroy, es necesario seguir un aislamiento estricto en personas contagiadas o en contacto directo con la persona enferma. En el Reino Unido, la UKHSA ha pedido a los infectados y sus contactos directos que se aíslen 21 días.
Deben cumplirse las medidas del COVID-19. Utilizar mascarilla, lavarse las manos constantemente y mantener una distancia prudencial.
También se debe evitar estar en contacto con fauna silvestre o exótica.
Es posible que, de no cumplirse estas medidas, los casos se multipliquen durante los próximos días y semanas. ¿Hasta convertirse en una pandemia? Esto no lo puede afirmar ni denegar nadie. El COVID-19 empezó del mismo modo. Con pocos casos en todos los países y sin víctimas mortales, hasta que el virus se transmitió a miles de personas y las estadísticas cambiaron.
Por lo tanto, está claro que no hay que bajar la guardia.
Sigue cuidándote como si el virus del COVID-19 no se hubiese marchado (que, de hecho, no lo ha hecho) y no estuvieras protegido/a frente a él. Solo así podrás evitar el riesgo de la viruela del mono.
Enlace a web del Dr. Paul Alexander (fuente externa a AlertaTierra.com).