Los informes indican que ya son al menos 65 las víctimas mortales causadas por el potente terremoto de 6,8 grados que sacudió el sudoeste de China. Según los medios de comunicación locales, los daños materiales son graves.
El epicentro del terremoto fue Luding, una ciudad en una región montañosa remota ubicada a unos 226 kilómetros de Chengdu. Precisamente, el pasado viernes se había ordenado a los 21 millones de habitantes de Chengdu, capital de Sichuan, que se quedaran confinados en sus casas debido al COVID-19.
Según ha explicado la cadena de noticias CCTV, 17 personas han muerto en la ciudad de Ya´an y 29 en la prefectura de Ganzi. Otras 16 personas han desaparecido y hay 50 heridos.
Los seísmos que se han venido registrando han provocado algunos apagones eléctricos en zonas de Ganze y Ya´an.
El terremoto desató el pánico en la población que sintió cómo sus apartamentos se zarandeaban por el temblor. Muchas personas salieron corriendo gritando y llorando.
Según han explicado testigos de este fenómeno geológico, cuando empezó el terremoto, todos los perros se pusieron a ladrar. Fue un momento aterrador.
Enlace a video (Fuente externa a AlertaTierra.com). Crédito: South China Morning Post
Enlace a video (Fuente externa a AlertaTierra.com). Crédito: South China Morning Post
Enlace a video (Fuente externa a AlertaTierra.com). Crédito: South China Morning Post
Fotografía es captura de pantalla.