
Personal de un vuelo de American Airlines podría haber expuesto a los pasajeros al virus de la Hepatitis A
El 1 de octubre de 2019, los Centros de Control y Prevención de Enfermedades de los Estados Unidos, informaban que uno de los hombres de la tripulación de un avión de American Airlines había confirmado haber contraído Hepatitis A (HAV) y que los pasajeros de múltiples vuelos se habían visto expuestos al virus.
Sucedió en un vuelo entre San Francisco y Charlotte
Personal de un vuelo de American Airlines podría haber expuesto a los pasajeros al virus de la Hepatitis A. Sucedió en un vuelo entre San Francisco y Charlotte el 21 de septiembre de 2019, según ha confirmado el Departamento de Salud Pública del condado de Mecklenbuerg, en Carolina del Norte. El Departamento ya ha contactado con 18 pasajeros locales y todos ellos recibieron la vacuna contra la Hepatitis A.
Según el CDC, la transmisión de la Hepatitis A a través de manipuladores de alimentos a sus clientes es algo extremadamente raro, pero sucede y es algo que hay que tener muy presente. Las personas infectadas no se lavan las manos después de usar el baño y cuando manipulan los alimentos pueden infectarlos y a los usuarios de estos alimentos.
En las últimas semanas, varios empleados de diversos restaurantes en Estados Unidos han dado positivo por Hepatitis A, por lo que, entre otros, SC Waffle House podría haber expuesto a sus clientes al virus de la Hepatitis A, así como un restaurante del condado de Erie.
El Departamento de Sanidad está estudiando qué hacer al respecto
Después de confirmarse el cuarto caso de exposición de Hepatitis A en un restaurante en Peninsula, el Departamento de Sanidad está estudiando qué hacer al respecto.
Parece ser que comer en un restaurante puede llegar a ser bastante arriesgado, pero siempre que los empleados utilicen guantes y sigan los protocolos establecidos de seguridad, el riesgo debería ser menor.
Desgraciadamente, si fueran solo los restaurantes… Sin embargo, el problema no solo está en los restaurantes. Existen 28 estados en el país con brotes confirmados de Hepatitis A. El CDC lleva monitoreando casos desde el año 2016.
A fecha 4 de octubre de 2019, se confirma que hay 30 estados afectados con: 26.789 casos, 16.157 hospitalizaciones y 274 muertes
Mayor riesgo los que tienen contacto directo con el infectado
La Hepatitis A puede infectar a cualquiera, aunque los grupos de mayor riesgo – según la CDC – son quienes tienen un contacto directo con alguien infectado por Hepatitis A, viajeros, hombres que mantienen contactos sexuales con otros hombres, las personas que se drogan, quienes cuidan de personas adoptadas de países donde existe la Hepatitis A, personas con hemofilia, personas que trabajan con primates, enfermos crónicos del hígado…
La hepatitis A es una enfermedad altamente contagiosa que puede afectar de forma leve a más grave y durar entre unas semanas a incluso meses. En algunos casos raros, la Hepatitis A puede resultar crónica, provocando que la infección sea recurrente y que pueda causar otras complicaciones peores, como un fallo de hígado y la muerte.
Es más común donde existe una higiene deficiente o inexistente
Suele transmitirse cuando una persona ingiere, sin saberlo, un objeto, alimento o bebida, contaminado previamente con cantidades mínimas de heces de una persona afectada por el virus. Entre los alimentos que pueden estar afectados se incluyen alimentos procesados, congelados, recolectados, crudos, e incluso después de su cocinado. Es más común donde existe una higiene deficiente o inexistente.
También se puede contagiar al entrar en contacto con una persona infectada a través del sexo o por cuidarla. De hecho, en los Estados Unidos, la Hepatitis A se contagia mucho más de persona a persona, que por el consumo de alimentos o bebidas infectadas.
Los síntomas suelen aparecer unas cuatro semanas después de estar expuesto al virus y durar varios días o de 2 a 6 meses, dependiendo de quién se haya visto afectado. Entre los síntomas que se pueden manifestar se incluyen fiebre, cansancio, pérdida de apetito, náuseas, vómitos, dolor abdominal, orina oscura, heces de color claro, dolor articular, color amarillento de la piel…
Si se sospecha de Hepatitis A, es necesario que el médico prescriba unas pruebas analíticas específicas.
Es posible que el médico recomiende la vacunación contra la Hepatitis A a quienes se hayan visto expuestas recientemente (en un periodo de 2 semanas), al virus.
Se recomienda descansar, hidratarse y alimentarse bien.
Por lo general, la enfermedad se resuelve por sí misma, aunque algunas personas necesitan ser hospitalizadas.
Es importante lavarse las manos siempre que se haya ido al baño. Con jabón y agua caliente, durante al menos 20 segundos.
Imagen de archivo