Lo básico para tu supervivencia: Refugio.
En nuestros artículos anteriores, hablamos sobre el agua y los alimentos, imprescindibles en tu despensa de preparación para una emergencia. Pero, sin un lugar donde guardarlo, sería inútil. Por lo tanto, un refugio es una de las cosas más importantes en las que tienes que pensar. Necesitas encontrar el refugio al que acudirías si se produce una situación de emergencia.
Lo básico para tu supervivencia: Refugio. Cuando se piensa en un refugio para afrontar una situación de emergencia, probablemente todos/as coincidimos al pensar en nuestra propia casa. No podemos imaginarnos otro lugar donde podamos sentirnos mejor. Y, efectivamente, afortunadamente, algunas emergencias probablemente podamos pasarlas en nuestra casa. Evitar abandonarla resulta pues la primera opción, pero también tenemos que tener presente que existe la posibilidad de que tengamos que abandonarla para acudir a un refugio exterior. Así que te explicamos todas las opciones que tienes.
Tu casa
No puedo hablar mucho sobre tu casa, puesto que no hay nadie mejor que tú que pueda conocer los pros y los contras de permanecer en ella durante una emergencia.
Tu casa es el lugar donde te encuentras a gusto, seguro/a, donde tienes todos los recursos a mano… No obstante, tendrás que hacer algunos ajustes para adecuarla a ciertas necesidades que puedas tener cuando se produzcan determinadas circunstancias de emergencias.
Cuando se produce un desastre natural, tenemos algunas opciones antes de tener que salir en busca de un refugio exterior. Pero, podría suceder que tengamos que seguir una orden de evacuación o decidamos abandonar nuestro hogar.
Lo básico para tu supervivencia: El Refugio exterior
Somos conscientes que no hay nada que desagrade más que tener que abandonar tu propia casa. Sin embargo, no siempre será la mejor opción para permanecer en un lugar seguro. El tipo de refugio, más que de tus propias emociones, depende de la situación en la que te encuentres. Por lo tanto, necesitarás otras opciones como refugio. Sí, has leído bien, hemos dicho refugios, en plural. ¿Acaso vas a necesitar más de un lugar como refugio? En nuestra opinión, cuantas más opciones tengas, mejor.
Para empezar, descarta la idea de que un refugio es una ubicación concreta. Debe ser el lugar más seguro, para ese momento que estás viviendo, donde puedas preparar tu “hogar”. Resulta imposible prever todas las situaciones de emergencia que podrían producirse, por lo que tampoco puedes saber dónde encontrarás un lugar seguro.
Lo básico para tu supervivencia: Refugio. Hasta llegar a ese refugio, es más que probable que tengas que desplazarte (posiblemente a pie), echar mano de tu mochila de emergencia y recorrer el trayecto hasta llegar a él. Dependiendo de dónde te haya sorprendido esta situación o de la distancia a la que te encuentres de ese otro refugio, quizás tengas que pernoctar al aire libre.
No estaría mal que aprendas distintos métodos para prepararte un refugio en una situación de supervivencia.
Miles de personas emigran cada día en el mundo buscando un lugar más seguro. Desgraciadamente, muchas mueren en el trayecto. Utilizan todo tipo de elementos como transporte para llegar a su destino, y no todos son realmente seguros. En estos casos, parten sin tener la menor idea de a dónde van ni de qué harán cuando lleguen. Donde son recogidos y acogidos hasta que determinen qué hacer con ellos, son su refugio temporal.
Cuando piensas en un refugio exterior, ¿en qué piensas? Intenta encontrar un lugar donde puedas permanecer, por ejemplo, una hora, un día o incluso una semana…
Puede ser:
- Un lugar en el campo donde sueles ir a hacer una barbacoa
- Una parcela pública
- Un terreno alejado de la ciudad cerca de una casa abandonada (esta opción podría ser menos segura, pero podría valer como último recurso)
- una parcela que te hayas comprado y donde no tienes nada aún, pero, donde podrías preparar un refugio temporal.
- Un lugar que descubriste y que pocos conocen, alejado de la ciudad y tranquilo.
Seguro que ahora se te ocurren unos cuantos sitios más.
Lo importante es que sea un sitio seguro, accesible, y lo más cercano posible a tu casa. Puede que tengas que ir caminando, así que seguro que no te haría gracia tener que recorrer demasiados kilómetros a pie. Los huracanes, los tornados, las inundaciones… Algunos desastres naturales pueden hacer que las carreteras sean impasibles. Piensa en distintas rutas, según el medio de transporte que puedas utilizar en ese momento.
Elabora una lista de los lugares que podrían servirte como refugio temporal. Puede que en un principio apenas tengas. Pero, no te preocupes, ya lo irás completando. Usa un mapa para identificarlos y guárdalo en tu mochila de emergencia.
Recuerda que debe ser un lugar en el que puedas descansar, refugiarte alejado/a de los demás, donde puedas comer y beber tranquilamente, e incluso donde puedas pasar la noche, curar tus heridas, etc.
Preparar de antemano
Algunos lugares, pensados como refugio exterior, podrían prepararse antes de que tenga lugar una emergencia. Por ejemplo, si has comprado un terreno o parcela en una zona tranquila, rústica, y alejada del bullicio de la ciudad, es posible que la consideres como el refugio exterior ideal donde huir en caso de tener que abandonar tu casa.
Puedes ir adecuándola poco a poco, por si tuvieras que usarla como lugar de refugio.
Si estás pagando una hipoteca por tu casa, te preguntarás cómo vas a comprar un terreno. Ya es difícil hacer frente a los gastos que hay en la actualidad. Pero, resulta importante contar con al menos un refugio exterior disponible, ya sea de propiedad, en alquiler, o simplemente una zona de las montañas o en el campo que no sea propiedad de nadie, pero a la que puedas acudir en caso necesario.
Eso sí. Lo idóneo es que sea tu propiedad. No hace falta que sea una finca de 10.000 metros cuadrados. Puedes tener una pequeña casita de madera o una choza construida con tus propias manos. El caso es contar con esa otra opción, por si acaso.
Hasta ahora, hemos hablado de refugios exteriores en el campo, pero cuenta también con pisos o casas como refugio exterior a tu casa habitual. Puede estar ubicado en pueblos pequeños, donde apenas haya habitantes, oculto entre árboles o montañas.
Sea cual sea el refugio por el que te decantes, debes asegurarte que está protegido de desastres naturales, así como de los peligros causados por el hombre. Debe protegerte de los elementos y ser lo suficientemente seguro como para protegerte de depredadores, humanos, y viceversa.
Para que sea más seguro si cabe, asegúrate que no sea visible desde el cielo, por si sobrevuela la zona un helicóptero o un avión.
Un refugio perfecto debería estar lo suficientemente lejos de tu casa
Un refugio perfecto debería estar lo suficientemente lejos de tu casa habitual para mantenerte seguro/a ante cualquier tipo de emergencia, pero lo suficientemente cerca como para que puedas llegar fácilmente.
Lo ideal es que puedas llegar a él como mucho en el transcurso de un día, a pie o con un vehículo. Entre 84 y 161 kilómetros de distancia estaría bien si tienes previsto acudir con un vehículo y entre 40 y 80 kilómetros si piensas ir andando.
Piensa en el tipo de vehículo de transporte que podrías utilizar para ir a tu refugio, por ejemplo, una bicicleta de montaña, un 4×4 o incluso una lancha hinchable.
Si tienes que ir con un vehículo a motor, que no esté a una distancia mayor del máximo de combustible de tu tanque. Es posible que no puedas repostar por el camino.
Contar con un pozo, arroyo o río en tu propiedad es una bendición y casi una obligación. Pero, tu refugio no debería verse desde esta fuente de agua. ¡Cuidado! Tienes que contar con las lluvias que puedan producirse y pensar en las posibles inundaciones que podría provocar.
Lo básico para tu supervivencia: Refugio. El refugio debe contar con la capacidad suficiente como para albergar a más personas. Puede que cuando vayas, no lo hagas solo/a, así que tendría que ser lo suficientemente amplio para que estéis cómodos/as.
Si tienes una tierra o parcela, procura contar con un medio alternativo para conseguir comida: un huerto propio, gallinas… La calidad del terreno también es importante para este fin.
Necesitarás leña para calentarte y para cocinar…
Obviamente, tus necesidades serán las que te vayan indicando lo que tienes que hacer para acomodar el refugio a ti. Pero, no te preocupes, iremos ampliando información sobre los preparativos que puedes hacer para adecuar tu refugio en otro artículo.
Procura que el refugio sea accesible durante todo el año
Procura que sea accesible durante todo el año, de forma que puedas ir de vez en cuando para ir preparándolo, para hacer tus simulacros, ir haciéndote a vivir en ese lugar… Podrías ir, por ejemplo, los fines de semana para relajarte y acomodarte. Tienes que acostumbrarte a vivir un tiempo en él sin que te sientas a disgusto. ¿Quién sabe? Puede que, en algún momento, tengas que acudir para quedarte un buen tiempo…
Para que puedas ampliar información sobre cada uno de estos puntos, te aconsejamos la lectura de nuestros artículos “Lo básico para tu supervivencia”.
Lo básico para tu supervivencia-1. Comida
Lo básico para tu supervivencia-2. Agua
Lo básico para tu supervivencia-4. Seguridad
Y, no te olvides de nuestra amplia explicación sobre “tu mochila de emergencias ideal”.
AlertaTierra.com tiene previsto hablarte de muchos temas que, seguro que te ayudarán en tu preparación, así que no te pierdas nuestros artículos y prepárate con nosotros para cualquier tipo de emergencia.